Aquí te dejo la séptima clase del curso de cómo ajustar cantidades sin contar calorías, en el que estás aprendiendo la mejor forma de saber cuánto comer en tu día a día en función de tus circunstancias personales y necesidades.
Algo en lo que siempre insisto cuando hablamos de requerimientos, de cálculos y de cantidades es en que las fórmulas no son infalibles.
Es decir, nunca debemos considerar el resultado de una fórmula como una verdad absoluta. Una fórmula nunca nos va a decir a ciencia cierta cuáles son nuestros requerimientos reales.
Entonces ¿para qué sirven las fórmulas?
Las fórmulas nos dan una aproximación teórica de cuáles podrían ser nuestras necesidades. Pero una vez que tenemos ese punto de partida, tendremos que comprobar si efectivamente se corresponden con nuestras necesidades reales y, en caso contrario, adaptar los resultados.
Para eso sirve la calibración.
Cómo calibrar el plan
En esta clase vamos a ver paso a paso cómo calibrar el plan que hemos obtenido con la calculadora para saber si se corresponde realmente con nuestros requerimiento reales.
A lo largo de la clase también te enseñaré cómo ir ajustando el plan para que adecúe lo más posible a tus necesidades.
Aquí tienes la videoclase:
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Bueno, pues ahora ya sabes lo que toca… ¡ponerlo a prueba!
Empieza simplemente por echarle un vistazo a las cantidades. Si conoces aproximadamente las cantidades de lo que sueles comer a diario te resultará sencillo hacer la comparación y sacar una primera impresión “a ojo” de cuánto se acerca o se aleja el plan de lo que tú sueles tomar.
Si no tienes ni idea de las cantidades que sueles manejar, tendrás que ponerlo en práctica para poder sacar conclusiones.
En cualquier caso, no hay nada mejor que probar algo para saber cómo te hace sentir… Muchas veces las primeras impresiones engañan 😉
Y recuerda también que nuestras necesidades no son estáticas sino que pueden ir evolucionando y cambiando con el tiempo según vaya cambiando nuestro cuerpo y nuestras circunstancias.
Por eso es importante también hacer calibraciones periódicas como te he explicado en el vídeo.
Por otro lado, conforme vayamos haciendo la calibración pueden surgir algunas situaciones especiales (como que el plan teórico esté muy alejado de nuestras necesidades reales), o bien que busquemos objetivos concretos (como pérdida de grasa corporal, aumento de masa muscular…). ¿Qué hacer en estos casos?
Pues eso es precisamente lo que vamos a ver en la próxima clase del curso ¡nos vemos allí!