Aquí tienes la octava clase del curso de alimentación y salud mental, en el que te estoy enseñando cómo alimentarte para mejorar la salud de tu cerebro y tu bienestar mental.
La adicción a la comida es algo controvertido sobre lo que, a día de hoy, todavía no existe consenso entre los profesionales.
Lo que sí sabemos es que algunos alimentos (más bien productos) comparten características similares a otras sustancias consideradas adictivas, fundamentalmente por su capacidad de alterar nuestros circuitos de recompensa.
Conocer esto es importante para saber que, en muchas ocasiones, el consumo que hacemos de ciertos alimentos no es “libre” y su ingesta no depende solo de nuestra fuerza de voluntad.
¿Existe la adicción a la comida?
En esta clase vemos qué alimentos son más potencialmente adictivos y las consecuencias que esto tiene en nuestra relación con la comida y en nuestra salud mental.
Aquí tienes la videoclase:
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Como has visto en la clase, la adicción a la comida es un tema muy interesante y controvertido.
Ahora ya conoces las características que hacen que algunos alimentos sean potencialmente más adictivos ¡Y el top 5 según los estudios!
Resulta impactante conocer las similitudes que tienen estos alimentos con otras sustancias consideradas adictivas… Antojos, consumo compulsivo, pérdida de control, dificultad para dejar de consumirlos, etc.
Pero también es cierto que hay otros factores que influyen en estas conductas y que hacen que unas personas pueden exponerse sin problemas a ellos mientras que otras sean incapaces de hacer un consumo moderado.
Por eso siempre queda la duda de qué fue antes, el huevo o la gallina. Es decir, si la adicción se debe a un trastorno de la conducta alimentaria subyacente o si los trastornos de la conducta alimentaria pueden desencadenarse por la exposición a estos alimentos potencialmente adictivos.
En la próxima clase hablaremos de “comer emocional”, algo que suele asociarse a una mala relación con la comida pero que no siempre es así. Así que si te interesa ¡Allí te espero!