Aquí tienes la tercera clase del curso de Cómo comer fuera de casa, en el que aprenderás técnicas, trucos y estrategias para poder disfrutar de las comidas y cenas que hagas fuera llevando un estilo de alimentación saludable.
A menudo nos vemos obligados a comer fuera entre semana por necesidad. Porque vivimos lejos del trabajo o porque no tenemos el tiempo suficiente para ir a comer a casa. En estos casos, lo ideal es poder contar con ideas de comida para llevarnos en un tupper, como vimos en la clase de Trucos para adaptar el menú a tu vida del curso de Planificación de Menús Semanales.
Pero hay veces que no podemos o no queremos llevarnos nuestra propia comida. En estas circunstancias, nuestra prioridad es que esa comida que no tenemos más remedio que hacer fuera de nuestra casa nos perjudique lo mínimo posible. Esto es más importante cuanto mayor sea el número de días que necesitamos comer fuera.
Comer fuera por trabajo
En esta clase vamos a ir viendo todas las opciones que se nos pueden presentar a la hora de comer fuera de casa dentro de nuestra jornada laboral. Desde las menos saludables, y que deberíamos evitar, hasta las más recomendables y que nos van a perjudicar lo mínimo posible.
También repasaremos los pros y contras del “menú del día” de los restaurantes, y aprenderemos a elegir los mejores platos y elaboraciones dentro de las opciones del menú.
Aquí tienes la videoclase:
Este contenido solo está disponible para los alumnos.
Puedes acceder con tu cuenta o unirte a la escuela online para tener acceso a todos los cursos, menús y recetas premium, sesiones en directo y a la comunidad privada.
Bueno, ya has visto que comer de lunes a viernes fuera de casa no tiene porque ser un problema. Lo fundamental es tener claras las prioridades y conocer algunos trucos y estrategias básicas como las que te he contado.
Además, después de haber aprendido a analizar y detectar las opciones más o menos saludables de un menú del día… ¡Ahora ya no habrá carta ni menú que se te resista!.
Como ejercicio, puedes empezar a practicar cada vez que veas una pizarra de “menú del día”, intentando decidir cuál sería la mejor opción. Si quieres, puedes hacerle una foto a la pizarra y enviármela con la opción que tu elegirías, y te contestaré con mi opinión sobre la opción más saludable de ese menú. ¿Te animas?
Mientras tanto… ¡Te espero en la próxima clase!