Aquí tienes la segunda clase del curso de inflamación y dieta antiinflamatoria, en el que aprenderás lo bueno y lo malo de la inflamación, qué la origina y cómo cambiar nuestra alimentación para mejorarla.
No todos los procesos inflamatorios son iguales.
En función de la causa que la origine, y de cómo respondan nuestras defensas, la localización, los síntomas y la evolución de la inflamación será diferente.
Por este motivo es importante conocer los diferentes tipos de inflamación que podemos encontrarnos.
Qué tipos de inflamación hay
En esta clase te voy a enseñar los tipos fundamentales de inflamación que existen, en función de dónde se localice dicha inflamación y de cómo sea su evolución en el tiempo.
Aquí tienes la videoclase:
Este contenido solo está disponible para los alumnos.
Puedes acceder con tu cuenta o unirte a la escuela online para tener acceso a todos los cursos, menús y recetas premium, sesiones en directo y a la comunidad privada.
Como has visto en la clase, podemos clasificar la inflamación en aguda o crónica; y también en local o generalizada.
Además, como hemos visto en la clase, tanto los procesos inflamatorios agudos como crónicos puede ser a su vez locales o generalizados.
Los procesos inflamatorios agudos son los que vemos más frecuentemente porque sus síntomas son mucho más evidentes… vamos ¡que no suelen pasar desapercibidos! Seguro que incluso tú has tenido alguna vez una inflamación aguda localizada o generalizada… ¿se te ocurre algún ejemplo? venga, te lo pongo como deberes para que repases el concepto.
Sin embargo, los procesos inflamatorios crónicos suelen pasar más desapercibidos… y ese es uno de los principales problemas. Porque, además de que dificultan su diagnóstico, también hace que sea mucho más difícil reconocer cuál es la causa que la está produciendo y, por lo tanto, tratarla.
Bueno, pues espero que te haya resultado interesante y útil esta clase. Y, si quieres seguir aprendiendo más sobre la inflamación y cómo mejorarla… ¡te espero en la próxima clase!